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Itinerarios
Gorgona, Pianosa e Isla de Elba: 3 días en el Archipiélago Toscano

Una caminata a pique del mar

Senderismo, esnórquel, observación de aves, ciclismo: en las ex-islas-prisiones del Archipiélago Toscano hoy en día se puede caminar, andar en bicicleta, sentir el perfume más auténtico del Mediterráneo, comer solamente productos locales.

Gorgona, Capraia, Montecristo, Pianosa todavía no son totalmente accesibles. En algunos casos porque las cárceles todavía funcionan, en la mayor parte son oasis naturales delicados como la Isla de Montecristo, que debe ser preservada permitiendo el acceso sólo a pequeños grupos de visitantes.

Proponemos un itinerario entre algunas de estas islas: Gorgona, la más pequeña, inmersa en las aguas cristalinas frente a Livorno, donde aún se encuentra una colonia penal agrícola; Pianosa, un terreno sobre el mar, donde se encontraba la más antigua de las penitenciarías del archipiélago y que hoy en día es uno de los ejemplos mejor conservados de ecosistema mediterráneo, con sus fondos límpidos, sus acantilados, la posibilidad de realizar actividades al aire libre a pie y en bicicleta.

También nos detendremos en la Isla de Elba, la más grande de las islas del Archipiélago, una prisión sui generis para Napoleón, que la eligió como lugar de exilio cuando desembarcando de la fragata Undaunted en Portoferraio el 4 de mayo de 1814.

1.
PRIMER DÍA
Gorgona, senderismo con picnic confinado

Nos embarcamos temprano en la mañana desde Livorno para llegar a la isla que aparece en el horizonte y donde llegamos después de poco más de una hora. Gorgona sigue funcionando como prisión, por lo tanto se puede visitarla sólo en grupos, sin alejarse del camino principal. No es posible llevar cámaras fotográficas o teléfonos inteligentes que serán custodiados durante la excursión. Ante estas pequeñas molestias, Gorgona ofrece la tranquilidad y el silencio que se espera de una isla rodeada de los colores y perfumes del Mediterráneo.

El itinerario prevee un paseo por los caminos blancos más allá del pueblo, en la tranquilidad de los pinares y robles. Se puede almorzar con los productos km 0 preparados por los presos y ofrecidos en el "Picnic Confinado" servido sobre mesas de madera a la sombra de encinas. Por la tarde se visita la Torre Vieja de construcción por parte de Pisa, la Iglesia San Gorgonio y Cala Maestra. En verano es posible bañarse en las transparentes aguas del puerto turístico, antes de regresar a Livorno.

Para organizar su viaje es necesario reservar en la Oficina de Turismo de Livorno: comune.livorno.it

Nos embarcamos temprano en la mañana desde Livorno para llegar a la isla que aparece en el horizonte y donde llegamos después de poco más de una hora. Gorgona sigue funcionando como prisión, por lo tanto se puede visitarla sólo en grupos, sin alejarse del camino principal. No es posible llevar cámaras fotográficas o teléfonos inteligentes que serán custodiados durante la excursión. Ante estas pequeñas molestias, Gorgona ofrece la tranquilidad y el silencio que se espera de una isla rodeada de los colores y perfumes del Mediterráneo.

El itinerario prevee un paseo por los caminos blancos más allá del pueblo, en la tranquilidad de los pinares y robles. Se puede almorzar con los productos km 0 preparados por los presos y ofrecidos en el "Picnic Confinado" servido sobre mesas de madera a la sombra de encinas. Por la tarde se visita la Torre Vieja de construcción por parte de Pisa, la Iglesia San Gorgonio y Cala Maestra. En verano es posible bañarse en las transparentes aguas del puerto turístico, antes de regresar a Livorno.

Para organizar su viaje es necesario reservar en la Oficina de Turismo de Livorno: comune.livorno.it

2.
SEGUNDO DÍA
Portoferraio, el exilio mediterráneo de Napoleone

Desde Livorno nos trasladamos en coche hasta Piombino, donde tomamos el ferry hacia Portoferraio. Por la mañana hacemos una breve excursión al Promontorio Enfola, un itinerario que ofrece vistas panorámicas de la costa y regala perfumes del matorral mediterráneo.

El itinerario comienza entre las blancas arenas de las playas de Scaglieri y Forno, para continuar hasta Punta Penisola inmersa en espesos bosques de encinas, árboles típicos del matorral de Elba, para llegar hasta el Golfo de Viticcio y luego a la plaza en el promontorio Enfola, donde hay una antigua pesquería de atún. De vuelta en el pueblo, por la tarde visitamos algunos lugares napoleónicos: el Palacio del Municipio, en la época conocida como la tienda de galletas que horneaba pan para los presidios de Cosimo I y las dos residencias napoleónicas, la Villa de los Molinos con jardín con vistas al mar y la residencia de verano de Villa San Martino. Seguimos paseando por las calles del centro histórico, con las pescaderías y las pequeñas tiendas y -recomendado- tomamos un aperitivo con uno de los vinos de Elba DOC. Pasamos la noche en Portoferraio y temprano por la mañana nos dirigimos a Marina di Campo donde nos espera el ferry hacia Pianosa.

Desde Livorno nos trasladamos en coche hasta Piombino, donde tomamos el ferry hacia Portoferraio. Por la mañana hacemos una breve excursión al Promontorio Enfola, un itinerario que ofrece vistas panorámicas de la costa y regala perfumes del matorral mediterráneo.

El itinerario comienza entre las blancas arenas de las playas de Scaglieri y Forno, para continuar hasta Punta Penisola inmersa en espesos bosques de encinas, árboles típicos del matorral de Elba, para llegar hasta el Golfo de Viticcio y luego a la plaza en el promontorio Enfola, donde hay una antigua pesquería de atún. De vuelta en el pueblo, por la tarde visitamos algunos lugares napoleónicos: el Palacio del Municipio, en la época conocida como la tienda de galletas que horneaba pan para los presidios de Cosimo I y las dos residencias napoleónicas, la Villa de los Molinos con jardín con vistas al mar y la residencia de verano de Villa San Martino. Seguimos paseando por las calles del centro histórico, con las pescaderías y las pequeñas tiendas y -recomendado- tomamos un aperitivo con uno de los vinos de Elba DOC. Pasamos la noche en Portoferraio y temprano por la mañana nos dirigimos a Marina di Campo donde nos espera el ferry hacia Pianosa.

3.
TERCER DÍA
Pianosa, la luz y los colores del mar y de la tierra

Desde Marina di Campo seguimos el tramo de mar que separa Elba de Pianosa, donde se llega en una hora. Desde el puerto turístico paseamos por la costa entre la naturaleza y la historia de la isla y su colonia penitenciaria. Visitamos los restos de la Villa de Agripa Postumo, sobrino de Augusto que fue exiliado aquí después de las maniobras del palacio para facilitar el ascenso de Tiberio. Llegamos a las ruinas de la llamada Casa del Marqués, situada no por casualidad en el punto más alejado del puerto: en efecto, aquí los presos enfermos de tuberculosis pasaban el período de convalecencia.

Cerca se encuentra una de las calas más bonitas de la isla. De vuelta en el pueblo, esperando el ferry que lleva de vuelta a Elba, caminamos por la aldea fantasma entre las calles que llevan el nombre de personas relacionadas con la lucha contra la mafia. El acceso a Pianosa está limitado a un máximo de 330 presencias al día. En la isla es posible organizar actividades de ciclismo, senderismo y esnórquel en el azul transparente de las pequeñas bahías. 

Desde Marina di Campo seguimos el tramo de mar que separa Elba de Pianosa, donde se llega en una hora. Desde el puerto turístico paseamos por la costa entre la naturaleza y la historia de la isla y su colonia penitenciaria. Visitamos los restos de la Villa de Agripa Postumo, sobrino de Augusto que fue exiliado aquí después de las maniobras del palacio para facilitar el ascenso de Tiberio. Llegamos a las ruinas de la llamada Casa del Marqués, situada no por casualidad en el punto más alejado del puerto: en efecto, aquí los presos enfermos de tuberculosis pasaban el período de convalecencia.

Cerca se encuentra una de las calas más bonitas de la isla. De vuelta en el pueblo, esperando el ferry que lleva de vuelta a Elba, caminamos por la aldea fantasma entre las calles que llevan el nombre de personas relacionadas con la lucha contra la mafia. El acceso a Pianosa está limitado a un máximo de 330 presencias al día. En la isla es posible organizar actividades de ciclismo, senderismo y esnórquel en el azul transparente de las pequeñas bahías. 

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