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Massa y Cozzile
Photo © Atauri
Photo © Atauri

Massa e Cozzile

Dos centros unidos por una antigua calle romana

Massa e Cozzile se divide entre las altas colinas y la llanura, entre los primeros tramos de los Apeninos en Pistoia, los bosques de castaños y olivos, los viñedos y los campos cultivados. Los dos centros, como sucedía frecuentemente en estas zonas, han sido disputados por Pistoia, Lucca, Florencia y Pisa.

Hoy en día son muy distintos, pero se mantienen unidos por una antigua calle romana todavía transitable. Ambos se caracterizan por su atmósfera medieval y por el tipo de paisajes que ofrecen.

Qué puedes ver en Massa e Cozzile

Massa es quizás uno de los centros fortificados más antiguos de la zona, con sus murallas, de las cuales se conservan algunas de sus partes, y sus torres. En el pueblo se entra de la Puerta de los Campos, paseando hasta llegar a la Iglesia románica Santa Maria Assunta, donde se encuentra un crucifijo de madera del siglo XV, y una terracota vidriada que representa a la Virgen con el Niño, procedente del taller de Buglioni. Para saber más sobre el descubrimiento de las obras de arte sacro, puedes visitar el Museo San Michele, en parte situado en la capilla homónima. Se exponen pinturas, vestimentas litúrgicas y mobiliario sagrado.

Subiendo por la histórica calle, se llega a Cozzile. Te sorprenderá el Palacio De Gubernatis, que se distingue por su ubicación sobre la cima. En el centro del pueblo se encuentra una plaza pequeña, pocos pasadizos para llegar a ella, pero con unas vistas muy pintorescas. Gracias a su posición, parece que desde aquí arriba, en los días de cielo despejado, se pueden ver incluso todas las provincias de Toscana.

Massa es quizás uno de los centros fortificados más antiguos de la zona, con sus murallas, de las cuales se conservan algunas de sus partes, y sus torres. En el pueblo se entra de la Puerta de los Campos, paseando hasta llegar a la Iglesia románica Santa Maria Assunta, donde se encuentra un crucifijo de madera del siglo XV, y una terracota vidriada que representa a la Virgen con el Niño, procedente del taller de Buglioni. Para saber más sobre el descubrimiento de las obras de arte sacro, puedes visitar el Museo San Michele, en parte situado en la capilla homónima. Se exponen pinturas, vestimentas litúrgicas y mobiliario sagrado.

Subiendo por la histórica calle, se llega a Cozzile. Te sorprenderá el Palacio De Gubernatis, que se distingue por su ubicación sobre la cima. En el centro del pueblo se encuentra una plaza pequeña, pocos pasadizos para llegar a ella, pero con unas vistas muy pintorescas. Gracias a su posición, parece que desde aquí arriba, en los días de cielo despejado, se pueden ver incluso todas las provincias de Toscana.

En los alrededores

El territorio de Valdinievole ofrece numerosos senderos para excursiones, perfectos para pasear, montar a caballo y en bicicleta, descubriendo las pequeñas aldeas, pueblos y castillos.

A unos pocos kilómetros de Massa y Cozzile está Montecatini Terme con sus históricas termas y el pueblo medieval de Montecatini Alto, al cual se puede llegar con un funicular en estilo modernista. 

El territorio de Valdinievole ofrece numerosos senderos para excursiones, perfectos para pasear, montar a caballo y en bicicleta, descubriendo las pequeñas aldeas, pueblos y castillos.

A unos pocos kilómetros de Massa y Cozzile está Montecatini Terme con sus históricas termas y el pueblo medieval de Montecatini Alto, al cual se puede llegar con un funicular en estilo modernista. 

Productos típicos

El principal producto de este territorio es el Aceite de Oliva Virgen Extra IGP Toscano que se obtiene prensando aceitunas de las variedades Frantoio, Moraiolo y Leccino. Bruschetta, sopas o cremas de verduras nunca faltan en los menús de los platos autóctonos y el aceite producido aquí valoriza el sabor. Además, con los productos de la tierra, las dos localidades son una parada en el Camino del Aceite Borghi y Castillos de Valdinievole.

El principal producto de este territorio es el Aceite de Oliva Virgen Extra IGP Toscano que se obtiene prensando aceitunas de las variedades Frantoio, Moraiolo y Leccino. Bruschetta, sopas o cremas de verduras nunca faltan en los menús de los platos autóctonos y el aceite producido aquí valoriza el sabor. Además, con los productos de la tierra, las dos localidades son una parada en el Camino del Aceite Borghi y Castillos de Valdinievole.

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